Charlie Swift (Pierce Brosnan), ha trabajado para el veterano jefe de la mafia Stan (James Caan) durante veinte años, operando hábilmente como un implacable profesional y eficiente asesino a sueldo. Cuando un jefe rival elimina a Stan y a todo su equipo, siendo Charlie el único superviviente, este decide vengar a su amigo sin detenerse ante nada.