En Tokyo, la imprudente madre soltera Keiko se muda a un pequeño apartamento con su hijo de doce años Akira Fukushima y, ocultos en maletas, sus hermanos Kyoko, Shigeru y Yuki. Los niños tienen diferentes padres y no van al colegio, pero llevan una vida feliz con su madre. Cuando Keiko encuentra un nuevo novio deja a los niños solos, dándole algo de dinero a Akira para que se encarge de sus hermanos. Cuando el dinero se acaba, Akira se las apaña para encontrar formas de sobrevivir con los pequeños sin electricidad, gas o agua en casa, y con el dueño pidiendo el alquiler.