La dulce y poco sofisticada Sunny trabaja como camarera en un club nocturno de Washington. Después de salvar fortuitamente a un alto dignatario árabe de visita por su país, es recompensada con un trabajo en el Departamento de Protocolo. El único inconveniente es uno de sus jefes; pero, gracias a su encanto, conseguirá salir airosa de tan difícil situación.